Se podría pensar que en Venezuela las mujeres somos vistas como seres especiales, guías y cabezas de familia, que gracias a nuestra apariencia e inteligencia hacemos que nuestro país se sienta orgulloso hasta de presumir de gran cantidad de cetros de belleza mundial.
Sin embargo aun vemos como hay algunas mujeres de diversas edades que desmotivadas desertan del ámbito estudiantil y/o laboral o dejan de realizar sus metas, debido a que sufren de manera directa o indirecta de agresiones o maltrato por parte de sus familiares o incluso jefes.
Preocupante situación.
Se ha logrado detectar según un estudio realizado por el Instituto de Investigaciones de Convivencia y Seguridad Ciudadana - INCOSEC, (ONG que trabaja de la mano con Amnistía Intl.), que por ejemplo en Venezuela, hasta agosto de 2009, según las cifras manejadas por la organización, cada 2 días por lo menos, una mujer era asesinada por razones de género y su homicida podía ser cualquier persona.
Durante el primer trimestre del 2010, cada 2 días, murió al menos una mujer a manos de su pareja.
Hay un dato estadístico derivado de un estudio del Fondo de las Naciones Unidas, publicado por el diario El Universal en abril de 2011, que nos debe llevar a reflexionar, cuanto más profundo es el significado del concepto violencia de género en nuestra sociedad.
Este estudio indica que cada 18 segundos una dama es maltratada en el mundo y este maltrato no está referido solo al físico.
En nuestro país, la violencia psicológica y sexual, el acoso y el hostigamiento son los tipos de violencia más recurrentes.
Por esta razón es importante situarnos en nuestro contexto diario y estar atentas a evitar que los comportamientos agresivos se vuelvan cotidianos aprendiendo a diferenciar una situación derivada del estrés, de un acto realmente violento contra nosotras.
La ley orgánica sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia (de abril 2007) puede ser un instrumento guía para lograr este objetivo, ya que busca crear condiciones para prevenir, atender y sancionar la violencia contra la mujer sea cual fuere el caso.
En nuestro país, contamos con elementos de apoyo como INMEMUJER organismo adscrito a la Alcaldía Metropolitana de Caracas que promueve la educación y defensa de los derechos de las mujeres.
Mientras más conocimiento tengamos acerca de cómo reconocer y defendernos de la violencia de género no física, mayor será la autoestima para combatirla y educar a las nuevas generaciones.
Hola, aprovecho para comentar tanto el primer artículo sobre los jóvenes con la condición física descrita por Ashby y el segundo, sobre la violencia de género. El primero me causa mucha alegría porque he conocido de cerca, en mi trabajo, a varios grupos de estos jóvenes, todos estudiantes, haciendo pasantías y a punto de graduarse. Lo que me resta por decir, que no haya dicho mi amiga Ashby, es que pienso si ese supuesto "obstáculo" de no poder comunicarse "normalmente" (resalto las comillas) es lo que hace que se desenvuelvan en un mundo feliz, o mejor, para no exagerar, en comparación con el resto de los mortales. Creo que toda persona con alguna discapacidad, que no caiga en el error muy grave de esconderse y evitar salir al mundo a lograr lo que desea, es muy digna de admiración y de todo el aprecio y estímulo que se le pueda brindar. Y, es un gran placer hacer contacto con ellos. Hay que aprender con ellos. En cuanto a la violencia de género, todavía a estas alturas del tiempo, es casi como de ficción que siga ocurriendo, pero es así. Las mujeres, (y los hombres si también alguno sufre con ello) debemos hablar mucho sobre ello y denunciarla para acabarla. Y es muy importante acotar, que el abuso no es solo físico, también y con muchísima frecuencia es verbal. Cuidado con ello. Saludos. Gladys.
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