domingo, 23 de agosto de 2015

Cambio.

Entre las grabaciones de mi programa de radio, grabaciones de casting de voz, mi trabajo en recursos humanos, salir a compartir con amigas, pasar muchas horas con mi amado músico, aprender a meditar, ejercitarme (como pueda!), tener clases de ingles, acudir a citas medicas para controles de rutina (gracias a Dios!)  y luchar a diario contra las adversidades de vivir en esta ciudad, había dejado un lado mi blog.
 
Hay instantes en los que de repente me agarra la inspiración en medio de cualquier momento del día, pero cuando me siento frente al computador esa momento se desvanece y la pantalla sigue en blanco y me doy cuenta de que ciertamente lo único permanente es el cambio.
 
Durante estos últimos 2 años he visto gente a través de mis redes a las que quizás no conozco o si, y les veo felices...sobre todo aquella que independientemente de la edad que tenga, finalmente logra dedicarse a hacer lo que desea, lo que les hace felices, y si les produce ingresos económicos o no, eso no es lo únicamente importante...muchos han dejado sus trabajos para sencillamente sonreírle a la vida, porque se atreven a dar el cambio.
 
En este momento el país donde vivo, quizás no es el mas idóneo para abandonar tu trabajo "seguro" para dedicarte solo a hacer lo que amas o te gusta, por lo menos no de primera mano...pero eso no significa que necesariamente debas posponer o renunciar a lo que realmente sabes te hará feliz.
 
He aprendido a que hay que irse preparando, que no se trata de suerte sino de perseverancia y cuando las cosas deben suceder, pasaran. Si te mantienes firme en tu meta, luego de confirmar cual es, todo te llega.
 
Si, es cierto, por mas que lo intentes a veces las cosas no se dan y debes cambiar el rumbo, pero eso mas que fracaso también da sentido a que debes seguir intentándolo y quizás lo que ganes será comprender que no era eso que buscabas lo que debías encontrar sino que el esfuerzo te lleva a resultados positivos o quizás hasta cambios que no habías pensado, creído o imaginado.
 
Se vale dar tumbos, ninguna edad cronológica garantiza que ya no puedas cambiar el rumbo de tu vida...solo la muerte debería detener nuestros pasos y nada más.
 
Creo firmemente también que "mientras haya vida hay esperanza!" y es así como a veces cuando encuentro que la flojera, la frustración, la desmotivación, el desencanto, la tristeza, intentan ganarme busco inmediatamente no darles poder ni rendirme y lo único que aplico es el cambio de actitud...quizás al principio resulta forzado, porque si estas desganado ¿Cómo vas a querer de pronto animarte y levantarte?
 
Pero, si, "me obligo" a ver todo lo bueno que tengo, a escuchar una canción que por su letra y su ritmo me lleven a sonreír y aunque suene a cliché ahora aprendí a meditar y relajarme! (bueno, no aprendí, porque aun todos los días vivo ese proceso)
 
Una buena película, una rica comida (de esas que ahora es un lujo consumir aunque lo haga en una feria de un centro comercial), un bonito recuerdo...porque honestamente antes me iba de tiendas pero ya no puedo ni quiero.
 
Como venezolanos es cierto que tenemos muchas razones para desencantarnos cada día más, pero también como personas tenemos muchas para no olvidarnos de que podemos seguir adelante aun con esfuerzo porque no estamos solos, aunque a veces nos sintamos así.
 
Estamos muchos luchando por salir adelante y ver cambios: cambios en nosotros mismos y cambios hacia nuestra sociedad.
 
Los cambios no solo afectan de manera individual, sino también de manera colectiva, por eso es importante asumir siempre la responsabilidad de las consecuencias y rodearse de gente que te aprecie y ame cuando decides cambiar, porque a veces son temporales, pero cuando son definitivos muchos se pueden molestar.
 
Hay cosas que en apariencia van a tomar mas tiempo en cambiar...por ejemplo, el lugar donde resido, porque hay muchos aspectos que evaluar, pero si es una meta, debo evaluar que pasos seguir para lograrla y entender que algunos cambios pueden ser inmediatos, sorpresivos o no...lo importante es conseguirlos.
 
A veces parecemos una sociedad de frustrados, pero cuando creo estar segura de eso, de repente se cruza gente en mi camino que me demuestra que no es verdad...que aun tienen proyectos, emprendimientos y que aunque la mayoría son jóvenes de edad otros lo son solo de espíritu y no se rinden.
 
Ese el lado del cambio en el que deberíamos querer permanecer, en ese que no se rinde e innova cada vez que es necesario, sin lamentarse...
 
No es fácil pero tampoco imposible...a veces es solo cuestión de observar y dejar que junto con tus acciones el tiempo, te ayude a decidir.