Hace mas de 2 años, se me plantearon cambios imprevistos de 180º (ò mas) y llegaron a mis manos, ocho frases claves que sinceramente, no supe entender en ese momento…pero puedo decir que no fue casualidad.
Después de 2 años ahora por decisión propia, comienzo a organizar cambios, mis espacios, mi tiempo, ideas y proyectos y buscando entre mis viejos apuntes redescubro entre ellos estas ocho frases, así que me queda claro que definitivamente: nada es casual.
Yo acepto, yo aprovecho, yo asumo, yo me comprometo, yo me ocupo, yo agradezco, yo confío, yo apuesto a ganar…no son solo frases sueltas…son las etapas para prepararnos a recibir lo que deseamos y que a veces no llega, porque no las hemos aprendido a comprender ò creemos que no nos merecemos lo bueno que esta por ocurrir.
En esta oportunidad, creo ya superada mi etapa de “duelo” inconsciente por resistirme (sin saber) a superar, entender aquellos cambios de hace dos años, me siento capaz de explicar el significado que esas ocho oraciones tienen para mi y deseo compartirlas con Uds.
Durante las próximas ocho semanas enunciaré cada una deseando que dejen una sensación gratificante y por que no? También les ayuden a reflexionar.
Yo Acepto…
No es secreto que como individuos reaccionamos de manera diferente a una situación, que sobre todo de forma inesperada, se nos plantea en algún momento.
Puede ser un cambio definitivo ò temporal, pero aceptarlo cuando no lo hemos esperado o no nos hemos preparado, es realmente algo no muy fácil de hacer para muchos…reconozco hoy, que yo soy una de esas personas.
Incluso a veces creemos estar listos y aun así decir YO ACEPTO, se hace difícil…
Cuando yo recibí la llamada que me anunciaba que mi papá había muerto (hace ya casi 2 años) por un paro respiratorio, después de un sufrimiento por un cáncer de más de un año que detectaron muy tarde, me pareció no entender la noticia.
Recuerdo hoy que colgué el teléfono y me quede pensando si había escuchado mal.
Aunque sabía que este era el desenlace lógico.
Estaba en la oficina, le di la noticia a mi pareja en ese momento, a mis hermanas, a mis compañeros…Recuerdo que llore, pero vivía fuera de la ciudad donde murió, así que debía organizarme rápido para poder viajar para verlo y despedirme aunque él ya no pudiera escucharme ni verme…Cuando finalmente llegue a Caracas, entré a la funeraria, creo que aun un poco inconsciente y hasta que no lo vi, allí “durmiendo”, entendí que no había aceptado hasta entonces, que ya no lo escucharía decirme “Dios te bendiga”.
Recuerdo también en este momento, a un amigo que recibió la confirmación el año pasado, en el mes de Febrero, (“casualmente”) de que su separación de cuerpos, daba paso a la firma del divorcio. Cuando conversó conmigo y me dijo sentirse triste por esa llamada de los abogados, le pregunté si es que él pensaba que podía haber vuelta atrás, si aun estaba enamorado…
Me sorprendió mucho su respuesta: me contestó que no, que él estaba claro en que ya entre ellos había solo una bonita amistad y el matrimonio había terminado (vivían separados hace más de un año) pero que esa llamada significaba que no había vuelta atrás, es decir que ahora si debía aceptar que ya el divorcio era un hecho…
Otro ejemplo, hay personas que huyen el mismo día del matrimonio porque decir yo acepto y para toda la vida, no es nada fácil
Existen tantos ejemplos y seguramente cada uno de Ustedes tiene alguno muy personal donde le ha costado decir, Yo Acepto lo que esta pasando, lo que viene, así lo haya planeado ò no.
Por supuesto no asocio necesariamente la frase con algo negativo, a veces, hay oportunidad de aceptar cosas muy buenas y también nos cuesta.
Yo acepto son dos palabras poderosas, porque abren la puerta para adentrarnos en una nueva experiencia, en una nueva visión, en una nueva etapa, que quizás puede ser ò no conocida y esperada, pero representa casi siempre un antes y un después.
Puede que haya algo de falta de madurez en el temor de decir: yo acepto lo que soy, yo acepto lo que pasa, yo acepto lo que hice…pero definitivamente hasta que no asumes esta responsabilidad sobre todo contigo mismo, es difícil poder avanzar.
Lo dicen la mayoría de las terapias para tratar personas con vicios: primero debes aceptar que lo tienes, para poder iniciar el camino a la recuperación.
Si nosotros deseamos recibir, sentirnos felices según nuestro propio concepto, si deseamos que nos toleren como somos, si queremos conocernos, si queremos darnos nuevas oportunidades, si queremos cambiar lo que creemos puede no ser tan bueno por algo mejor, lo primero que honestamente creo debemos hacer es decir YO ME ACEPTO y ACEPTO para luego entender que hay cosas que no podemos cambiar; que tanto nosotros como los demás podemos cometer errores; aceptar que la perfección única y absoluta no existe y aceptar que si estas vivo es porque aun tienes oportunidad de recibir, aunque no seas lo que esperas ò planeaste...asi que atrevamonos a aceptar!
No hay mejor triunfo que aceptar mi derrota.
(Anónimo)
La libertad primero hay que aceptarla, después planificarla y, finalmente, disfrutarla.
(Pablo Picasso)
El hombre que no acepta la responsabilidad de sus acciones actúa de mala fe.
(Jean-Paul Sartre)
Aqui una foto de papà y yo...
Yo acepto que ya no està fisicamente,
pero siempre lo llevo conmigo en mi corazòn, experiencias y pensamiento...
TE AMO
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